El uso de sustancias embriagantes no es exclusivo de la especie homo sapiens. Muchos otros animales se sienten irremisiblemente atraídos por ciertos compuestos de origen vegetal, capaces de modificar su conducta. Pero tengamos mucho cuidado, nuestras drogas casi siempre son tóxicas para los felinos: cannabis, café, tabaco, alcohol…
Hoy hablaremos de Nepeta cataria, la «hierba de los gatos» o catnip.
Nepeta cataria. Catnip
Es una planta perenne, de escaso porte, no más de 60 cm. Su tallo es ramificado, gris y piloso. Las hojas son acorazonadas, de borde serrado y velludas por el envés.
Las flores son pequeñas, organizadas como una espiga, de tonalidades amarillentas y rosadas, con punteaduras rojas.
Esta especie pertenece a una perfumada familia, lamiaceas, donde están incluidas, entre otras, albahaca, menta, tomillo, romero…
Originaria de Europa, también crece expontaneamente en Norteamérica y el Oeste de Asia.
Como todas las plantas de su familia botánica, produce un poderoso y agradable aroma, en este caso, con tonalidades cítricas, capaz de atraer desde bien lejos al pueblo felino.
Efectos del catnip sobre los gatos
La mayoría de los gatos, un 80%, se sienten atraidos por los aceites esenciales que emana esta hierba, en particular las hembras y los machos castrados, aunque hay razas que son indiferentes. Se supone que hay un componente genético que hace que ciertos felinos sean inmunes.
El animal receptivo la huele con pasión, mordisquea y mastica flores y hojas, se frota con ella. El efecto no tarda en evidenciarse, el gato se manifiesta feliz y jugetón. Tiende a repetir una y otra vez la ingesta, alcanzando altos niveles de euforia, incluso alucinaciones, no es raro observar como persiguen y cazan presas imaginarias.
Principio activo de la hierba de los gatos
Se conoce con el nombre de nepetalactona. Es un compuesto orgánico cuya fórmula química es C10H14O2, formado por dos anillos fusionados y derivado del isopreno.
Fue extraído de la «hierba de gatos» en 1941 mediante un proceso de destilación. Los gatos la detectan cuando sus vapores entran en contacto con su epitelio olfativo.
No afecta a la salud de los consumidores, aunque no podemos afirmar lo mismo del mobiliario y objetos domésticos del propietario. Esta sustancia es similar a otra que aparece en la orina de estos animales, lo que hace pensar que está relaccionado con el comportamiento sexual.
También actúa sobre otros animales, sirviendo como repelente de mosquitos y cucarachas. En humanos actúa como sedante ligero, bastante útil en caso de desperfectos hogareños debidos a la hiperactividad felina.
Más tarde se encontró la nepetalactona en una especie de madreselva, Lonicera tartarica, con cuya madera se fabrican juguetes para gatos y se les aparta de aquellas cosas susceptibles de experimentar daños colaterales.
Lonicera tartarica
Esta planta es nativa de Siberia y Asia Oriental. Introducida como ornamental en América del Norte, ahora actúa como especie invasora, propia de suelos degradados.
Es un arbusto de hasta 3 metros de alto que se agrupa formando matorrales espesos. Sus hojas son de forma ovalada de hasta 6 cm en su diámetro mayor. Las flores son vistosas, de tonalidades que oscilan del blanco al rojo, pasado por tonalidades rosadas intermedias. El fruto es de color naranja brillante y es consumido por las aves que de este modo dispersan las semillas.
Otras plantas felinas
No solo las especies antes citadas atraen a los gatos. Veamos algunos ejemplos:
a) Plantas no tóxicas para gatos:
• Valeriana: Sedante para los humanos, produce en los felinos el efecto contrario, similares a los del catnip. (Si quieres saber más de esta especie vegetal, te aconsejo el post: «Valeriana, la hierba de los dulces sueños y los gatos felices«).
• Tomillo, lavanda, menta, albahaca, producen también efectos relajantes en los gatos.
• Olivo: Las hojas de este árbol atraen a estos animales de forma semejante al catnip. Se frotan con ellas y las ingieren, atraídos por un aceite esencial, la oleuropeina. A consecuencia de esta ingesta, los gatos se comportan como si estuvieran en celo.
• Frutas: Fresa, sandía, melocotón.
b) Plantas Tóxicas para gatos:
Aunque las distintas especies vegetales los atraen en diversos grados, los gatos son muy aficionados a la botánica gastronómica. No siempre comen plantas con fines lúdicos, también las usan como purgantes intestinales, en particular, les ayudan a expulsar los pelos que ingieren en sus rituales de higiene.
Sin embargo, es preciso mantenerlos alejados de las siguientes plantas:
• Otras especies de madreselva diferentes a Lonicera tartarica, cuidado, las hay muy tóxicas.
• Lirios, cannabis, eucalipto, potos, tulipán, narciso, philodendron, adelfa, ajo, cebolla, manzano, albaricoquero, begonia, crisantemo, higuera, filodendro, hiedra…
Es tan preciso amar como respetar a nuestras mascotas. Tienen su propio mundo, fisiología y conducta, no invadamos su territorio personal con nuestras insensateces. Hay ciertas sustancias y alimentos que no debemos compartir con ellos.
Tan malo es humanizar a nuestros amigos animales, como tratarlos como juguetes o esclavos.