Las abejas obreras recolectan el polen, cuidan de las larvas, construyen la vivienda y la defienden de los enemigos. La reina imprime la identidad genética de la colonia engendrando a la totalidad de los individuos, vive más que nadie y cuando ella muere se clausura la colmena. Los machos, los zánganos, de corta existencia, solo sirven para fecundar. Estos insectos podrían ser considerados  hembristas. El león es machista. En su comunidad sólo hay descendientes de él y las hembras del harén, son las que paren y cuidan de los pequeños, cazan y son las últimas en comer. El Rey León no protege la manada por altruismo, únicamente cuida de la trasmisión de sus genes. Por eso, cuando derrotó al anterior monarca, mató a los herederos..

Las golondrinas son igualitarias. El macho y la hembra comparten las tareas. Construyen, empollan los huevos y cazan para los pequeños con la misma dedicación.

Algunos anfibios son de un sexo u otro según se necesite. Si la población desciende, la mayoría de los machos se tornan hembras. Si hay sobrepoblación, ocurre lo contrario. El género es menos importante que el bienestar común. ¡Sin prejuicios!

Las plantas que se reproducen mediante flores admiten muchas variedad. Hay árboles que tienen flores masculinas y femeninas en el mismo ejemplar, algunos tienen flores hemafroditas, también los hay que dentro de una misma especie, hay árboles solo con flores femeninas y otros sólo con flores masculinas.  Y, rizando el rizo, están los que se reproducen sin recurrir al sexo. ¡Unos adelantados!

El Homo sapiens, cazador y guerrero, formaba sociedades dirigidas por hombres, más aptos para estas tareas por su musculatura más potente. Pero ya no necesitamos cazar para comer y la tecnología ha desplazado la fuerza bruta en los asuntos bélicos. Hace años que el patriarcado ya no tiene sentido. La evolución, liderada por las mujeres, reclama igualdad, al modo de las Golondrinas, esto es el feminismo. Una minoría exige el matriarcado, las hembristas y los hombres acomodados en su papel, incapaces de evolucionar, gritan por quedarnos como estamos, los machistas.

La Naturaleza es neutral, favorece lo que sea más efectivo para la supervivencia de las especies. Una sociedad humana donde un género domine al otro no parece un buen proyecto de futuro. Violencia de género, trata de blancas, desigualdad de oportunidades… son estigmas que deben de ser extirpados por el bien común y por el futuro de la humanidad.