El municipio conquense de Villar de Cañas se encuentra sobre el Acuífero 23 y tan sólo a 120 km de Madrid. Tiene menos de 500 habitantes empadronados. Su paisaje es típicamente castellano, campos de cereales alternando con terrenos yermos sin cultivar, cuajados de plantas aromáticas y ásperos espartos, arboladas dispersas de encinas, sabinas o pinos; líneas de chopos indicando algún arroyuelo, cerros solitarios y un río que lo surca, el Záncara, que desemboca en el Guadiana.
En este territorio, el Consejo de Ministros decidió en 2011 establecer un Almacén Temporal Centralizado (ATC) de Residuos Nucleares. Según ellos, el paraje cumplía las condiciones requeridas: Baja actividad sísmica, ninguna figura legal de protección del patrimonio natural, materiales geológicos adecuados al propósito…y un Ayuntamiento encandilado con cifras de inversión próximas a los 900 millones.
Es difícil de entender que significa «temporal», por el contexto parece ser que dentro de un tiempo se llevarán la basura y aquí no ha pasado nada, así que mejor no preocuparse.
- ¿Alguien cree de verdad que van a hacer eso?, que ¿van a sacar la mierda después de tanta pasta y saliba gastada?
- ¿Se pueden ir trasladando de un lado a otro materiales radiactivos que siguen siendo letales durante miles de años?
Sin que sea, en este país, una novedad, la administración nos ha vuelto a engañar. El lugar previsto para el depósito es rico en materiales yesíferos y está muy cerca del agua subterránea ( Acuífero 23 ). Eso es un verdadero suicidio, el yeso es inestable y no podemos arriesgarnos a contaminar las aguas subterráneas, las que riegan nuestros alimentos y nos dan de beber.
¿Os imagináis que los Isotopos Radiactivos llegan al Guadiana?
La existencia de Parques Naturales o Zonas de Protección Especial no garantiza que los espacios que queden fuera no tengan los mismos valores, ni siquiera esta garantizada su propia seguridad, véase Doñana amenazada por los gaseoaductos de Felipe González o el urbanismo corrosivo de la Era Aznar. Según los estudiosos de la naturaleza los valores ambientales de Villar de Cañas son un verdadero tesoro y ya están en marcha los procesos de protección legal.
Lo que pasará en un futuro nadie lo sabe. El Gobierno Central apuesta por el proyecto, el Gobierno de Castilla- La Mancha está en contra. De nosotros depende la inclinación de la balanza.
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